La alameda potosina: historia fragmentada y patrimonio urbano olvidado

Abstract

En 1859 el Supremo Gobierno de la República, que había expropiado con antelación la huerta particular del Convento de los Carmelitas en San Luis Potosí, cedió sus derechos sobre este terreno al Gobierno del Estado representado por don Vicente Chico Sein, quien dispuso se convirtiera en paseo público. A más de 150 años de este suceso, olvidado por la fastuosidad del festejo bicentenario, éste espacio urbano sigue a la espera de recuperar su otrora magnificencia después de haber sido, en sus más esplendorosos tiempos, el prototipo de las alamedas provincianas del siglo XX, escenario de la llegada del ferrocarril y testigo del Centenario de la Independencia. Lugar de recreo y sosiego urbano, la alameda potosina fue por mucho tiempo en lo primero que vieron quienes llegaron y lo último que recordaron los que se fueron de la ciudad. Este artículo hace un recorrido por su historia y su historiografía con el objetivo de reflexionar sobre su descuido y la necesidad de reconceptualizarla como una unidad histórico-cultural coherente para fomentar su rescate como parte importante del patrimonio urbano de San Luis Potosí.